En Centro de Estudios Transdisciplinarios de Centroamérica (CETCAM) en su más reciente boletín Perspectivas 171, analiza la violencia sistemática que han sufrido los territorios indígenas durante el transcurso del 2023 en Nicaragua y, da cuenta de cómo los gobiernos de Honduras y Guatemala tienen seriamente comprometidos su Estado de Derecho y la democracia.
De acuerdo con el análisis de Perspectivas, en el transcurso del 2023 se han efectuado varios ataques a comunidades indígenas en la Costa Caribe de Nicaragua algunos de los cuales han terminado en saldos mortales, sin que haya una respuesta efectiva del Estado ante esta violencia.
“Los colonos son la punta de lanza, la cara más visible, de la expansión acelerada y violenta de la frontera agrícola para beneficiar a grandes propietarios y sus aliados, muchos vinculados con el régimen dictatorial de los Ortega-Murillo, por esa razón su impunidad está garantizada a pesar de las leyes que protegen a las comunidades indígenas”, detalla el análisis.
El centro estima que desde el 2015 a la actualidad más de 60 comunitarios han sido asesinados por los llamados colonos. “Asesinatos, secuestros, heridos, destrucción de asentamientos y de cosechas son algunas de las consecuencias de estos ataques”, explica.
Etnocidio y despojo a las comunidades
CETCAM calcula que aproximadamente 3,000 comunitarios miskitus y mayagnas se han visto obligados a abandonar sus tierras y huir a otras comunidades en Nicaragua y Honduras donde atraviesan penurias, hambre, pobreza extrema y desamparo. Ante este etnocio y despojo, la CIDH ha emitido medidas de protección para 15 comunidades, “sin que el gobierno de Nicaragua haya actuado para hacerlas efectivas mientras el acoso, las invasiones y los crímenes continúan”, menciona Perspectivas 171.
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El análisis considera que el régimen dictatorial de los Ortega-Murillo ha mantenido su voluntad de sostener el modelo extractivista, el despojo y la desprotección a las poblaciones indígenas y afrodescendientes, por lo que “mientras se mantenga este régimen difícilmente se resolverán las justas demandas de las comunidades indígenas y afrodescendientes, además que se mantendrá la expoliación y la destrucción de las tierras comunitarias”, considera el centro de pensamiento.
Estado de Derecho y democracia comprometidos en Honduras y Guatemala
En su acápite de Centroamérica CETCAM llama la atención sobre las políticas estatales implementadas por los gobiernos de Honduras y Guatemala, las que han motivado a la población a protestar por su nivel de descontento.
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Para CETCAM, “Honduras se debate entre las promesas de campaña, las esperanzas de la población, las viejas prácticas políticas y la estructura de poder que prevalece en el sistema político del país; y, Guatemala que, está persiguiendo a fiscales que han denunciado la corrupción y abusos a los derechos humanos, además de a activistas, periodistas, defensores de derechos humanos y organizaciones de sociedad civil; y, por el otro, está a las puertas de un proceso electoral que desde ya está tildado de irregular, corrupto y no llena las expectativas de la población sobre el cambio en la dinámica política”.